Roberto Jiménez Hidalgo
El Artista Plástico Roberto Jiménez Hidalgo, nació en el año 1971 en Isla de Pinos, actualmente Isla de la Juventud; –una pequeña isla ubicada a 90 millas náuticas del Puerto de Batabanó en el sur occidente del archipiélago cubano-.
Fue en “Mi Isla” –Como la nombra el maestro Jiménez-, el lugar donde pasé los primeros y más emocionantes años de mi vida… Allí nací, allí crecí y fue también en “Mi Isla” donde conocí a mis más grandes mejores amigos.
¡Mi Isla de Pinos!.
Fue desde “Mi Isla”, que descubrí la pasión por ella y por el arte, ambas son inseparables; la dibujo, la pinto, la esculpo y la añoro lo suficiente, como para no tener que extrañarla jamás… por eso siempre digo que el hombre es “la geografía de su propia isla”
Se que muchos se sienten identificados con la Isla de Pinos por varias razones y de diversas maneras… “cada hombre describiendo su autentica geografía”
El encuentro con el arte
Roberto Jiménez Hidalgo a la edad de 12 años, ingresa en la escuela vocacional de artes “Leonardo Luberta”, lugar donde comienza a formar su vocación de artista así como la concepción ética y estética de su obra, la cual, más adelante se consagra como indiscutible sello personal.
Durante su estancia en la vocacional de arte “Leonardo Luberta”, obtiene varios premios y reconocimientos, entre ellos, vale la pena destacar el Gran Premio en el III Salón Nacional de Escuelas de Arte, otorgado por el Ministerio de Cultura en el año 1983 en la ciudad de Matanzas. (Provincia de Cuba).
Desde muy pequeño mostró pasión por el arte; y aunque su vocación se hacía cada vez más evidente, su naturaleza rebelde, su declarada apatía al sistema y a participar de las actividades que de éste se generaban; pronto darán un giro a su prematura carrera.
Al concluir el segundo año en la Escuela Vocacional de Arte “Leonardo Luberta” la dirección político administrativa decide que debía ser separado del centro escolar.
Continúa sus estudios de secundaria básica en el Internado “14 de Junio”, denominado también Escuela en el Campo, por su ubicación y característica; ya que se trataba de un sistema escolar que combinaba el trabajo en los cultivos de cítrico con la enseñanza docente y “preparación militar”; constituidas bajo el lema: Estudio, Trabajo, y Fusil.
Los dos años siguientes no tuvieron por que ser diferentes para Roberto Jiménez Hidalgo en lo que a niño “rebelde” se refiere. Por el contrario, su actitud y rebeldía fueron en aumento. A sus cuestionamientos ideológicos ahora se sumarían las fugas sistemáticas del centro, la negatividad por participar en las labores del campo y un total rechazo a pertenecer y participar de las actividades organizadas por la UJC (Unión de Jóvenes Comunistas); todo esto, aparejado a su actitud antideportiva, hicieron que reprobara la materia de educación física, razón por la cual tuvo que repetir el año escolar.
Al año siguiente es nuevamente removido de escuela y fue asignado a un nuevo Centro Escolar, la entonces, también escuela en el campo “Pablo de la Torriente Brau”; lugar donde concluye el noveno año escolar.
Durante su estancia en las escuelas en el campo, Roberto Jiménez Hidalgo no perdió ni la intención, ni las esperanzas de convertirse en Artista Plástico, continuó pintando y dibujando siempre que se le presentaba la oportunidad, participando así en diversos concursos de artes plástica.
Al termino de sus estudios de secundaria básica, se presenta a los exámenes de convocatoria para ingresar a Academia de Arte Wilfredo Lam, siendo seleccionado y admitido en el año de 1987
Durante los años de la academia, no solo se reencuentra con maestros y algunos de sus ex compañeros de la vocacional, es justamente aquí donde descubre su pasión por la cerámica artística y la escultura en terracota. …La técnica de la cerámica pareciera haberse inventado para mi… -decía desde entonces-.
Siendo estudiante de la academia participa en diversas exposiciones y festivales culturales organizadas por las brigadas artísticas y la UNEAC (Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba). Entre los reconocimientos obtenidos entonces, cabe mencionar el Premio en el Festival Internacional “En un Mismo Jardín los Arboles de Todos los Pueblos” celebrado en Nueva Gerona, Isla de la Juventud como homenaje conmemorativo a los 100 años de la Gran Exposición de Paris de 1889.
A raíz de los compromisos de colaboración contraídos por la Academia de Arte y la Industria de la Cerámica, Jiménez comienza a trabajar en el departamento de diseño en la fabrica de cerámica “Tercer Congreso”; en este tiempo, y gracias a su gran inquietud por la tecnología, adquiere conocimientos y habilidades suficientes para mas adelante hacer sus propios hornos, y las herramientas necesarias para constituir su propio taller, el cual bautizó con el nombre de “Tierra y Fuego”.
De la Industria Cerámica a las Industrias Locales
A mediado de los años noventas, su profesor de tecnología Lázaro Tirador fue nombrado Director de Industrias Locales y propone a Jiménez trabajar en el departamento de diseño como Diseñador Realizador. En esta nueva empresa, Jiménez desarrolla varios proyectos de decoración, algunos de ellos aún se conservan en instalaciones gastronómicas y turísticas del país; como es el caso de la barra del famoso restaurante El Cochinito en Nueva Gerona, también trabajó en el diseño de las habitaciones del Hotel Mirador de Mayabe en la provincia de Holguín. Entre otros…
Al termino de sus estudios, y aunque ya tenía la firme decisión de convertirse en Artista independiente, es contratado como Profesor y Subdirector de la propia Academia; por ese entonces, gracias a su trabajo, la admiración y respeto de sus colegas artistas, es propuesto y nombrado Presidente de la Asociación Hermanos Saiz. Institución que reúne y promueve a los artistas jóvenes en cuba. Gremio con el cual continuó trabajando ya como Artista independiente y hasta el momento de su salida del país.
Fue durante la Academia y los años posteriores a ésta, que Jiménez descubre en la cerámica artística, el camino para emprender y desarrollar su polémica y controversial obra: Los Claustros, “sugerentes” o “evidentes” escenografías de barro y el Liberfreeden un hierofante y “silencioso” personaje que cohabita entre ellos, inmerso en las profundidades de si mismo. …Benéfica ilusión del alma…
Desde la primera muestra personal de Roberto Jiménez, titulada “Alto Contraste”, la obra es aceptada por la critica de manera inmediata; la madurez filosófica y la calidad de su trabajo, no sólo lo hicieron merecedor de varios premios y menciones; éstos, pronto lo colocaron en la lista de reconocidos Miembros de la Plástica y la Cerámica Artística Cubanos. Ya como miembro de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) participa en varias exposiciones Nacionales e Internacionales al lado de figuras de gran renombre en la Plástica Cubana de entonces. En más de una ocasión participa en la Bienal de Pequeño Formato “Amelia Peláez” organizada por el Museo Nacional de Cerámica Contemporánea Cubana, la Habana, Cuba.
Forma parte de la colección: “CUBA THE LAST SIXTY YEAR” Expo Internacional itinerante organizada por Bellas Artes y el Museo Nacional de la Cerámica de Cuba.
Junto a su entonces representante, Carlos Gabriel García inaugura en la Galería “Forma” en la Capital del País, la Exposición titulada “Eterno Espacio” la cual vendría a reafirmar su presencia como Ceramista. -vale la pena destacar que las palabras inaugurales estuvieron a cargo de la Dra. María Elena Jubría, quien además, en sus próximos libros y en la propia literatura académica, incluye el nombre del Maestro Roberto Jiménez Hidalgo en las páginas de la Historia del Arte y la Cerámica Artística Cubana-.
En el año 2000 y con motivo de la Séptima Bienal de la Habana, el Museo Nacional le encarga al Maestro Jiménez la elaboración de su proyecto mural cerámico titulado “La Marcha”. –mural de cerámica que fue realizado en su propio taller “Tierra y Fuego” en la isla de la juventud. Para la elaboración del proyecto contó con la colaboración de su amigo y colega el Artista Plástico Eliecer Díaz Rodríguez. En septiembre de ese mismo año, la obra estuvo lista para ser trasladada a la capital y colocada en su sitio final. Actualmente el mural se encuentra emplazado en el Parque Paula, situado frente a la Iglesia del mismo nombre en el Casco Histórico Habanero; hoy Patrimonio de la Humanidad.
El Artista Plástico Roberto Jiménez Hidalgo viaja en el año 2000 a la ciudad de México. Refiriéndose al país azteca, dijo: …una ciudad embelesadora de aromas, …“un autentico hechizo de envolvente cobijo”; su colorido, su gastronomía, su historia y la tradición cultural del pueblo mexicano, lo seducen por completo. Adquiere la nacionalidad mexicana, y se establece en la ciudad de México, lugar desde donde continua su labor artística.
GRABADO
“Musa Arañas Pineras”
Autor: Roberto Jiménez Hidalgo.:
Medidas: 58 x 58 cm
Técnica: Gofrado Grabado en Seco
Técnicamente es una entramada y sugerente manipulación de texturas que conforman la imagen de la Isla… propiamente refiriéndome a la Isla de los Pineros. …¡La Isla de Todos!
¿Porqué Musa Arañas Pineras?
– Es como un “pequeño” fragmento de entramada identidad. “Mi Isla” …Porque aunque la siento mía, estoy convencido que la Isla es de muchos, y muchos más…; algunos, ni siquiera tuvieron que nacer en ella para sentirla suya también.
Tomando en cuenta esto, para el titulo, pensé en palabras con amplio rango de interpretación. Por eso, cuando me refiero a la palabra MUSA, refiero también; a la inspiración, el ingenio, la poesía, la intuición, el arrebato, el estímulo, la deidad, y hasta la propia Diosa… y la palabra ARAÑAS, refiriendo tal ves al arañazo o huella que permanece latente en el recuerdo de cada pinero; pero es además, el áureo entramado presente en las telarañas tejidas también por arañas.
…De niño recuerdo la expresión: “ tiene musarañas en la cabeza” para referirse a la persona que fantasea, o piensa «demasiado» en un tema particular. (una idea fija)
ESCULTURA
«Liberfreeden con Alas”
Autor: Roberto Jiménez Hidalgo.
Medidas: 160 x 50 x 40cm
Técnica: Escultura Papel Mache.
Sinopsis.
La escultura describe la imagen de un Liberfreeden ascendiendo una escalera.
El Liberfreeden, (personaje protagónico en la obra de su autor) su nombre proviene de la fusión armónica, entre la palabra libre y la palabra libertad, ambas resumen la intención literal y filosófica, «la libertad libre»
Una aparente contradicción entre el titulo y la obra; ya que los Liberfreeden no tienen alas… «proponiendo el elemento de la escalera como una justificante para la sugerida acción».
Con algo de sutileza poética, esta obra pretende cuestionarnos sobre que tan limitado puede estar quien no tiene alas, para alcanzar un sueño.
TECNICA MIXTA
«Ventana de Interior»
Autor: Roberto Jiménez Hidalgo
Medidas: 51 x 40 x 5 cm
Técnica: Mixta.
Sinopsis
Aunque la obra y su titulo particularmente sugieren una posición con relación a la ventana; a primera vista, pareciera describir a una mujer encerrada tras la ventana. Estar dentro o estar fuera, es cuestión de una determinada posición relativa y en ocasiones la propia empatía que se genera entre la obra y el espectador, lo influyen e inducen a una u otra posición.
Según el autor: “alguien se asoma desde el exterior” … para aquellos que se encuentren en el interior, lo comprenderán así.
IMPRESION EN ACETATO
«Rayos X de un Liberfreeden»
Autor: Roberto Jiménez Hidalgo
Medidas: 64 x 44 cm
Técnica: Impresión en acetato
Sinopsis
Rayos x, o radiografía de un Liberfreeden, representa o simboliza el escáner aduanal de un viajero en el momento de abordar.
El escáner revela un objeto solido, brillante y palpitante en lugar de corazón… estudios mas profundos, determinan que se trata de la isla de pinos; una isla que hasta entonces, se encontraba anclada a noventa millas náuticas al sur del puerto de Batabanó en Cuba. Según fuentes cercanas todo parece indicar, que radiografías como esta, son comunes en las aduanas de todo el mundo, al momento de abordar un pinero.
AZULEJOS
«Liberfreeden con Disfraz de Mariano»
Autor: Roberto Jiménez Hidalgo
Medidas: 78 x 58 cm
Técnica: Mixta, madera, acrílico y resina
Sinopsis
¿Una apropiación o una intervención?
– Ambos términos parecen ser apropiados si tomamos en cuenta la acción en sí.
Homenaje a Maestros es el titulo de la serie con la que pretendo homenajear a muchos de ellos.
En esta ocasión, se trata de la obra “Gallo Amarillo” de 1956 del maestro Mariano Rodríguez; para ello, me he permitido la “apropiación” o “la manipulación” de esta obra en particular, para arropar a un Liberfreeden de pico morado.
…Haciendo que la acción justifique la propia intención….